La solución digital de la mayoría se puede encontrar entre estos dos servicios que, incluso siendo muy distintos, su funcionalidad es similar. en los siguientes puntos se valorará y se explicará lo que se tiene que tener en cuenta y porqué.
La seguridad y el rendimiento marca la diferencia
Un servidor privado virtual (VPS) es un término medio entre un servidor dedicado y un alojamiento compartido. En la mayoría de los casos, las empresas necesitan un alojamiento compartido. Al compartir un servidor entre muchos negocios el precio para mantener tu página web se abarata considerablemente, pero hay empresas que desean mayor seguridad y una mayor sensación de control sobre los parámetros de sus servicios, para ello, VPS es una gran opción.
Alojamiento Compartidos virtuales
El alojamiento compartido se hace de forma virtual, entonces se pueden contratar paquetes muy diversos y modificarlos al instante ya que los recursos utilizados están limitados encima de una máquina más potente por ello, simplemente cambiando el límite se puede disponer de múltiples opciones de forma casi inmediata.
En cambio los VPS utiliza todos los recursos que tiene disponible, por ello, también se puede modificar pero conlleva un tiempo ya que se tiene que añadir de forma manual.
La principal diferencia es que a pesar de que los dos tipos de alojamiento comparten un servidor con otros alojamientos, los VPS, tienen asignados una cierta cantidad de recursos exclusivamente para ellos. En cambio, el alojamiento compartido, a parte de que puede compartir el servidor con mas de doscientos clientes (VPS: suelen compartir con unos 40 usuarios mas como máximo), pueden llegar a disponer de algunas características muy similares a los VPS. Pero los recursos que se le asignan, no siempre están disponibles, ya que normalmente una gran cantidad de hostings dependen de la misma máquina llegando incluso a los miles.
En muchos casos esto no significa que la página web haga sus funciones mas lentamente ya que hay algunos proveedores, como creativekit.es, con una carga muy baja de alojamientos. Éste hecho provoca que todos sus alojamientos dispongan casi en su totalidad de sus recursos pudiéndolos comparar con algunos VPS con un precio en algunos casos diez veces mayor. Ya que las máquinas físicas disponen de una potencia capaz de, en el momento de mayor carga no superar el 20% de potencia en uso, la optimización y a la vez, la seguridad, son máximas.